“Lo que Freud reconoció, lo que nosotros mismos podemos reconocer todos los días, es que el proceder analítico no parte del enunciado del síntoma tal como acabo de describírselo, o sea, de acuerdo con su forma clásica definida desde siempre […] sino del reconocimiento de que eso funciona así”
Lacan, Jacques. El Seminario, libro 10, La angustia. Paidós, Buenos Aires, 2006, p. 302.