CITA·42

“Esto es lo que define la particularidad del lugar del psicoanalista, aquel que sostiene el cuestionamiento, la abertura, el enigma, en el sujeto que viene a su encuentro. Por lo tanto, el psicoanalista no se identifica con ninguno de los roles que quiere hacerle jugar su interlocutor, ni a ningún magisterio o ideal presente en la civilización. En ese sentido, el analista es aquel que no es asignable a ningún lugar que no sea el de la pregunta sobre el deseo”.

Laurent, Éric. “Principios rectores del acto analítico”. El psicoanálisis, n. 11. ELP, Barcelona, 2007, p. 10.

Los comentarios están cerrados.

Crea una web o blog en WordPress.com

Subir ↑