“Hace tiempo dije que la angustia no es sin objeto. ¿Cuál es el sentido del no sin de esta fórmula?
Simplemente quiere decir que para responder ala angustia hay algo análogo a lo que, a partir de cierta concepción del sujeto, se llama objetivo. El no sin no designa este algo análogo al objeto cuya señal en el sujeto es, según el psicoanálisis, la angustia, sino que solo revela que él no falta. Presupone, pues, el soporte gracias a al falta.
Ahora bien, como subrayé en su momento, toda evocación de la falta supone instituido un orden simbólico.”
Lacan, Jacques. Clase XIX: Saber poder. En el Seminario XVI: De un Otro al otro, pp. 269-280 (citas en pp. 269). Buenos Aires, Ed Paidos 2008.
“El campo de la angustia no es ciertamente sin objeto, como recordé al comienzo, siempre que se vea bien que este objeto es la apuesta misma del sujeto en el campo del narcisismo. Se revela entonces la verdadera función de la fobia, que es sustituir el objeto de la angustia por un significante que atemoriza, porque respecto del enigma de la angustia la relación señalada como peligrosa es tranquilizadora. Además la experiencia nos muestra que, siempre que se produzca el pasaje al campo del Otro, el significante se presenta como lo que es respecto del narcisismo, a saber, como devorador. Y da lugar a esa especie de preponderancia que la pulsión oral adquirió en la teoría clásica.”
Lacan, Jacques. Clase XIX: Saber poder. En el Seminario XVI: De un Otro al otro, pp. 269-280 (citas en pp. 279). Buenos Aires, Ed Paidos 2008.